Dean Schneider, de 27 años, ha renunciado a su trabajo para cuidar de una manada de leones y otros animales en su reserva Hakuna Mipaka Oasis, en la salvaje naturaleza de Sudáfrica.
Dean Schneider es conocido por su labor en la conservación de la vida salvaje y ha ganado popularidad al compartir sus experiencias e interacciones con animales salvajes en redes sociales.
Su Oasis Hakuna Mipaka sirve como santuario para diversos animales, y está dedicado a concientizar sobre la conservación de la vida salvaje y la importancia de coexistir con la naturaleza.
Dean Schneider enfatiza que no se refiere a sus interacciones con los leones como “jugar” con ellos. En lugar de eso, lo ve como más que simplemente jugar; se trata de vivir con los leones y ser parte de su manada.
Reconoce que hay un elemento de juego involucrado, similar a cómo los humanos disfrutan jugando entre ellos o con otros animales. Sin embargo, desea resaltar que también hay situaciones serias y únicas en las que se convierte en parte de la vida de los leones.
Dean es cauteloso al promover sus experiencias como simple juego y tiene como objetivo transmitir la profundidad y la responsabilidad involucradas en coexistir con estas magníficas criaturas.
Dean Schneider enfatiza que no está entrenando a los animales, sino que vive junto a ellos.
La comunicación, según él, es crucial en esta convivencia. Escucha y aprende su lenguaje, utilizándolo para comunicarse eficazmente.
Al comprender y hablar su lenguaje, forma una conexión más profunda con los animales y destaca la importancia de la comprensión mutua en su estilo de vida único de convivir con animales salvajes.
A pesar de los desafíos, Dean Schneider está satisfecho con las elecciones que ha hecho en su vida y es poco probable que regrese al convencional mundo corporativo de las finanzas en el corto plazo.
Su felicidad y realización provienen de vivir en armonía con la vida salvaje y dedicarse a la conservación de la vida salvaje.
Parece que Dean ha encontrado su pasión y propósito en su estilo de vida no convencional, y valora las experiencias y conexiones únicas que ha formado con los animales a su cuidado.