Un pequeño cordero que tuvo que enfrentarse no solo a un diagnóstico desconocido sino también al rechazo de personas que deberían amarlo se salvó milagrosamente gracias al compromiso y protección de otro animal: un gatito rescatado.
Normalmente se necesitan varios voluntarios en un refugio de animales para ayudar con el cuidado de cada animal, y un poco más de ayuda nunca está de más.
Dora, una gata rescatada por la organización “Happy Tails Farm Sanctuary”, ahora ayuda a otros animales dentro de la institución como si fuera una voluntaria.
Un corderito nació el día más oscuro del año, el solsticio de invierno, y su madre pereció dando a luz. Como el granjero que lo tuvo no pensó que podría cuidarlo sin su madre, lo dio en adopción por internet.
Cuando los miembros de “Happy Tails Farm Sanctuary” leyeron la publicación, llamaron de inmediato para preguntar sobre la adopción del pequeño cordero, pero el granjero se negó, alegando que no quería entregar al bebé a un centro de enfermería.
Carla Reilly Moore, cofundadora de “Happy Tails Farm Sanctuary” en Kingston, afirma: “Por lo general, a los agricultores no les gustan los asilos porque exponemos el lado malvado de la industria”.
Los rescatadores, sin embargo, no se dieron por vencidos y adoptaron en secreto al cordero sin mencionar la institución.
Pero una cosa era segura: lucharían por el corderito hasta poder adoptarlo y brindarle toda la ayuda que requería.
«Tenía la cola y los testículos vendados -muy mal, debo añadir-; estaba cubierto de diarrea cuando llegó al manicomio», explica Carla. No estábamos seguros de si seríamos capaces de lograrlo”.
Carla y su esposo, el director del asilo, lo ayudaron y posteriormente lo operaron para arreglarle la cola y los testículos.
“Nuestro milagro navideño fue Charlie, el corderito”, explica Carla.
Pero no eran sólo los voluntarios humanos los que vigilaban a Charlie; Dora, la gatita que había sido rescatada en noviembre, también estaba habitualmente allí.
Cuando regresó de su procedimiento, esperó con él hasta que despertó, momento en el que pudieron reanudar su juego.
Charlie pudo recuperar su salud debido a todo el amor y la atención que recibió, y nuevamente está creciendo bien. Dora y Charlie ahora tienen mucho en común: ambos tenían una necesidad desesperada, ambos fueron salvados de un hogar de ancianos y ambos pudieron recuperar su salud.
Carla agrega: “Establecieron una conexión instantánea, como si estuvieran diseñados para eso”.